En mis innumerables charlas de codo en barra es inevitable que no salga el socorrido (socorro) asunto de la política. No sé, me llevo la sensación, que sin llegar a ser pandemia entre los votantes de lo que llaman derechas hay un cierto hábito, de algunos, de tomar a los que no votamos al PP por medio gilipollas.
Se me ocurre pensar, por pensar algo, que debido sea a que en la derecha, salvo algún partido florero, están agrupados todos, los moderados y los inmoderados, algo que en la izquierda parece más repartido y puedes elegir el grado de entusiasmo de rojeras en el que te quieres encuadrar y a mí me deben de tocar siempre los de derechas virados a la derecha casposa. La sección dura.
También entre tan eminentes contertulios del color azul, quizás en el de los rojelios también, parece que si no te gusta el PP es que eres del PSOE, y viceversa. La opción de "no me gusta ninguno" no es opción. Si no estas conmigo estas contra mí.
Bueno, pues aunque se les atragante el café a mí me gustan cuatro cosas del PP, 4 de PSOE, cuatro del Albert, cuatro del coletas y cuarenta mías, algo que nadie me ofrece. Y en cualquier caso, si me lo ofreciera tampoco voy a votar a quien ofrece ideas como el que vende pescado. Es decir, TODOS.
Bueno, pues aunque se les atragante el café a mí me gustan cuatro cosas del PP, 4 de PSOE, cuatro del Albert, cuatro del coletas y cuarenta mías, algo que nadie me ofrece. Y en cualquier caso, si me lo ofreciera tampoco voy a votar a quien ofrece ideas como el que vende pescado. Es decir, TODOS.
Prefiero seguir siendo medio gilipollas. Y usted, que lo vote bien mientras yo boto, boto la pelota.
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