-NO TE PREGUNTES SI ERES FELIZ, PREGÚNTATE SI HACES FELICES A QUIENES TE RODEAN.
sábado, 17 de noviembre de 2012
Cuando me casé ya estaba malita.
Cuando me casé ya estaba malita....me dijiste ayer.
Si, Álvaro y aún así te casaste y la has hecho feliz, muy feliz estos dos años. Solo la recuerdo a Nieves de una forma. RIENDO.
No sé si era Nieves -su carácter-, o eras tú, con tu amor, seguro que los dos, los que conseguisteis que con esa mierda que Nieves tenía dentro de su cuerpo todos la tengamos con esa imagen de mujer feliz. Lo feliz, que tu amor, tu coraje y la gran bondad que desprendes han conseguido.
La suerte que ha tenido Nieves de cruzarse en tu camino. La misma que hemos tenido nosotros de cruzarnos en tu vida. Nos has dado una lección de vida a todos. Nos has dado una lección de amor.
“Cuando me casé ya estaba malita”. Sí, y te casaste y la hiciste feliz. Ahora quédate con eso.
Que difícil es expresar con palabras lo que llevas dentro…. Tan solo decirte que: Mi admiración, mi respeto y lo más importante, mi agradecimiento, por poder decir, QUE SOY TU AMIGO.
Nos cotizas a todos con tu amistad.
Adiós niña.
Álvaro: Adios amor mio. No existe ninguna palabra que defina el dolor que me provoca tu ausencia ... El vacio y el vertigo que siento. El hueco que has dejado en mi vida y en mi alma es un abismo. Pero GRACIAS por haber sido así. Tu luz, tu sonrisa, tu amor me han llenado desde el primer dia que nos conocimos y desde el cual no nos separamos.
Te quiero tanto ...
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