Primeros auxilios y técnicas reanimatorias

Seguro que discrepareis con mis técnicas, pero eso es problema vuestro.

Dicho esto, no me hago responsable de la puesta en práctica de mis teorías si no habéis practicado antes.

Repasaremos las normas básicas de reanimación y respiración artificial.

Ante un paro cardiaco lo mejor es agitar al interfecto de tal modo que el corazón pueda latir, incluso se le puede, -es más, se le debe- abofetear con saña y rigor. Si mostrase síntomas de no querer levantarse, primero habrá de comprobarse si es porque no le da la gana, con lo que habría que respetar sus deseos y a otra historia pero en caso contrario, habrá que practicar masaje.

Para ello hay que dividir el esternón en dos –no hace falta cortarlo, solo localizarlo y en la mitad inferior situar la parte baja de la palma de la mano. La otra mano se apoya sobre esta y se le da carrascazos a razón de uno cada segundo y en tandas de a cinco. Es más que seguro que se levantará y andará...incluso correrá o huirá. Luego conviene abrigarle y se le administrará Saldeva por vía oral, es decir una cada hora.

La respiración artificial consiste en soplarle en la boca. Primeramente habrá que limpiarle con una escoba cualquier resto orgánico que tenga en la garganta, se le girará el cráneo hacia atrás con cuidado de no romperlo para abrirle el tubo y se insuflará. Si el accidentado es varón, mismamente con los compresores de hinchar las ruedas será suficiente.

Esto es inútil o ciertamente una estupidez si la persona herida es una jamona de buen ver. Entonces llegado este caso u oportunidad propiamente dicha será necesario insuflar directamente, mientras, con la lengua se le limpian los restos de comida que pudieran haber quedado en la tráquea. Igualmente el masaje cardiaco deberá ser realizado en la susodicha, pero esta vez no buscaremos el centro del esternón, sino del pezón. No es difícil de localizar, suele estar al lado del otro.

Las picaduras o quemaduras suelen curarse con Halibut o Fenergam, igual que para las colitis severas nunca deberemos olvidar llevar en nuestro equipo una buena provisión de naranjas.

Recapitulemos.

-Cualquier picadura o quemadura: masaje cardiaco inmediato y traslado del paciente a una zona soleada. Suministrar Gripal.

-Bajadas de tensión: Subir inmediatamente al accidentado a un lugar elevado por ejemplo una secuoya (No olvidar en el botiquín una buena garrucha)

-Hipoglucemia: Tres pasteles, desayuno, comida y cena. Si persiste, abofetearle.

-Ahogamiento: Seis aspirinas y masajear con lija del tres.

-Estrangulación: Lo mismo pero igual.

-Si se va por las calicatas: torniquete inmediato a la altura del ano.

-Si tiene vahídos: que se deje de gilipolleces. Punto.

-Como reaccionar ante la picadura de un mosquito: Ante todo no perder la calma y mucho menos la compostura. Situar al accidentado boca arriba con los brazos y las piernas extendidos. Desabrocharle el nudo de la corbata y liberar su pecho de presión (Si está en bañador, basta con practicarle una abertura a la altura de la ilíaca). A continuación se le abre la boca y se le extrae el insecto en caso de que la picadura haya sido en la tráquea o pongamos por caso en la epiglotis.

Si la picadura ha sido en un brazo esto ya puede complicar la cosa y se necesitará segueta y sutura posterior.

Llegados a esta situación es mejor ponerle boca abajo y aplicar torniquete en el brazo contrario. El torniquete debe de ser aflojado cada semana para evitar gangrena.

Una vez aflojado, se volverá a apretar hasta que saque la lengua. Esta situación debe de mantenerse hasta que el veneno del mosquito haya sido extraído allá por el verano. Para ello se practica una escisión en la garganta con cuidado de no afectar al peroné y se absorbe bien sea con una pajita o con un simple aspirador de los que se usan en nuestras casas.

¡Listo! Se puede seguir la marcha.....creo.